lunes, 14 de julio de 2014

Los fantasmas de Sócrates




Conviene, pues, a la muerte oponer la confianza y al miedo de la muerte la cautela; cuando ahora, al contrario, a la muerte oponemos la huida y a nuestro parecer acerca de aquélla el desinterés, el descuido y la indiferencia. (Epicteto)

Son los fantasmas de Sócrates.