jueves, 31 de marzo de 2011

Zambrano



No me gustan las cruzadas en defensa de un escritor. Generalmente no suelen ser literarias. Más bien son ideológicas y políticas. Y hacen mucho daño a la propia literatura. Nos fijamos en hechos concretos y puntuales, y apartamos de nuestro camino la esencia de las letras.

Cuando existe esa rivalidad dialéctica entre dos o más autores, uno suele sacar sus armas, y el otro sus letras. Pero ambos quedan condenados al silencio impuro. A la vulgaridad. La clase suele estar en la omisión mutua.

La religión, al igual que la política, debe estar muy lejos de la literatura. Que yo sepa dios no ha escrito nunca un libro. Satanás tampoco. Y entre ellos han conseguido poco, literariamente hablando. La influencia es un gen extinto y poco recomendable. Y el cuerpo de lecturas es grandeza, pero también es omisión.

Cuando María Zambrano nos invitaba a adentrarnos en la espesura del bosque, nos guiaba de la mano hacia el silencio, a la pureza. Incluso recalcaba que debíamos entrar más adentro. Novalis escribía que aunque buscamos por todas las partes posibles el infinito, no encontrábamos más que cosas. Eran los ojos de Pound, era su mirada. Todo no está permitido, no puede estarlo. Y hay que dar ejemplo de sinceridad y literatura. La claridad viene del cielo, no lo olvides. Pero del cielo que vemos y tocamos. Del color azul mágico, de nuestra ilusión.

¡Qué bello es vivir!



Qué bella es la vida, sin tener que depender de nadie.

miércoles, 30 de marzo de 2011

La viñeta de la cubierta es de Aquilino Duque (año 1958)




Hay personas que no se acaban nunca



El término es también aplicable a la poesía. Poetas que no se acaban nunca. Para lo bueno y lo malo. Por ejemplo, Colinas, Rosales, Parra, no se acaban nunca. Son infinitos. Lees un verso que has repetido cien veces y descubres algo nuevo. El fogonazo que andabas esperando en el día que comienza. Y como contrapunto, en otros, la ausencia de eternidad.

He recibido la carta de Elías Moro, manuscrita y sellada con su norma visual. Hojas de un antiguo cuaderno, que me han recordado mil cosas. El contenido, es el contenido del corazón. Su corazón.

Cumbreño, Macías, Bernad, Moreno, Jiménez, Sevilla, Feu, Cotta, Piquero, Lama, Valls… Correos y correos por contestar que van saliendo poco a poco. La pausa es la prisa. La vida es el dolor. Y entre todos, un libro, el de Ferrán.

Un descubrimiento. Ando con la poesía chilena y Ferrán no se aleja de los cánones del fogonazo. Apartado de las corrientes vulgares e ignorantes que buscan la gloria fácil, él trabaja en lo suyo, que es la verdad poética.

Poco o nada más se puede decir. Que cada día están más abajo los que deben estar en el suelo, y cada día están más altos los que realmente prometen. Y la lista negra sigue engordando nombres y apellidos (¡y que no pare nunca por favor!).

Una cosa. Se me olvida. Entre la seriedad y la gracia, siempre la seriedad. La gracia es poco poética, y contiene toques de “hermetismo”. La seriedad es serenidad.

martes, 29 de marzo de 2011

Colinas, Duque y El libro de la pira



El libro de Antonio Colinas es una delicia, y gana muchos enteros con la edición de Francisco Aroca. La selección que ha hecho Abel de Aquilino Duque, es majestuosa. Un poeta es enorme cuando selecciona pocos poemas de sus libros, y el resultado es la propia elección natural. Hay que reconocer que la grandeza de un libro se limita a un puñado (escaso) de poemas. Y eso se ha conseguido con la obra de Duque.

Leo a Tomás R.R. y algo que él denomina El libro de la pira. Y desde luego hay mucho seleccionable, muchísimo. Es cuestión de tiempo, y es cuestión de trabajo. De mucho trabajo.

Con varios de los poemarios que he publicado como editor no estoy satisfecho (y como autor ni hablemos). No. Debo recibir el libro, leerlo, y si gusta mucho, esperar dos o tres años (lo ideal son cinco). Volver a leerlo y entonces tomar la decisión más acertada. Eso es lo que se debe hacer. Claro, últimamente quien me envía un libro recibe esta explicación y me manda al carajo. Menos mal que en España hay salud editorial: hay cangrejos, pistoleros, ultramarinos, cartoneros... Una delicia de ediciones exclusivas que llegarán al fondo del abismo.

Con la poesía pasa igual que con la amistad. Conoces a alguien que te cae bien, comienzas ese proceso amigable, y cuando pasan cuatro meses te aporta menos que las inversiones en lotería del estado. Debes conocerlo, y esperar cinco años para saber si verdaderamente la amistad es relativa o absurda.

A la pira, hay que mandar casi todo (he dicho casi todo) a la pira. Por favor el libro de T.R.R. no. O hacerse amigo de los poemas y meter en un cajón cinco años a los amigos, para ver si realmente han criado malvas.

Choquero de pura cepa





Es la primera vez que recibo un calificativo tan cariñoso y a la vez sorprendente (defiendo mi gaditanía a muerte). Y ha sido en Huelva. Acudía esta mañana a la oficina y me habían dejado un libro dedicado. Leo las palabras del autor, y entre ellas ese “choquero de pura cepa” que me ha llegado al alma.

Deseo dar las gracias al autor, al que no conozco. Tras hacer algunas consultas descubro que tiene una página en el diario Huelva Información donde relata diversos acontecimientos de la historia de Huelva. Ha publicado innumerables libros sobre el mismo tema, e incluso una calle de la capital onubense lleva su nombre.

Es curioso descubrir esta historia menuda cargada de anécdotas curiosas. Como el palacio encantado de Mora Claros, o la historia onubense del ciprés.

Libro entretenido de un choquero, de pura cepa (nació en Melilla, este gran cronista de Huelva).

Beauty



Deseaba dos cosas más que nada en el mundo:
enseñarte la nueva chaqueta azul marino
y darte un gran abrazo.
Acudí con los propósitos cerrados.
Venías deprisa, corriendo.
Nos fundimos como el amor de noche,
tu cabeza en mi pecho, mis manos
acariciaban tu dulce rostro.
Te acurrucabas y sonreías.
Al despegarnos una mala impresión:
me has llenado de caspa compañera.

lunes, 28 de marzo de 2011

En El Ojo Crítico



Esta tarde hemos estado hablando de la colección Álogos, de ediciones de la Isla de Siltolá, en El Ojo Crítico (RNE).

Blog del programa. (Aquí).


Audio del programa (Aquí).

José Manuel Benítez Ariza en "Diario de Cádiz"



Ver aquí.

Hat



Madre, me debe perdonar pues he pecado.
Compartí con Luzbel algunas horas,
y su influencia dejó viejos recuerdos:
esa pizca de sal, la grafía sobre el libro
de la vida de dios, las carreras de Ascot
con sombrero de copa sin glamour,
la mancha en el vestido de la vieja alcahueta,
la mentira a los niños, a los que nunca
quise. Pero sigo mirando y te ruego,
por favor perdóneme, lo siento.
Satanás se ha marchado para siempre.
Me dejó las camisas planchadas en la cama
y un olor a vergüenza que no logra aliviar
ningún perfume. Levanto las manos
para llamar al aire, pero es tarde,
nadie acoge. Ahora estoy solo,
un sombrero amarillo adquirido en Berkshire
muere en el césped. Y este dios,
ese dios, aquel dios que me odia
nos joderá la vida, madre.

domingo, 27 de marzo de 2011

Laura



Estoy en Lepe. Juan Carlos Aragón merecía el primer premio. No cabe duda. Javi Bohórquez, Juan, Fali, Julián. Están todos. El Selu a lo suyo, que no es poco. ¡Qué genialidad! Mamen ilusionado con la chirigota del Menéndez. Todo es un maleficio, un sueño entre penumbras.

Y de pronto, una llamada. Laura era muy joven. Deja dos hijos pequeños. Ese maldito cáncer acaba con su vida de princesa. Y el silencio interrumpe la magia de la noche. No hay tiempo para más. Se merece una historia, un abrazo, un corazón roto y la luz del tono se apaga.

Laura era muy joven. Deseaba vivir como los sueños desean venganza. Han cerrado sus puertas. No llueve pero lloran. Esta luz, esta puñetera luz del corazón nos determina. Han delatado un final previsible. Mañana será otro día y tú, Laura, estarás en los recuerdos.

Laura era muy joven. No hay derecho. No se puede elegir entre verdad y mentira. Todo es tan falso y misterioso que no nos atrevemos a decir, solo a cantar. Y va por ti Laura. Y por tus hijos.

Falsos serán aquellos que piensen en la vida eterna, cuando no hay nada más allá. La vida se acaba cuando comienza la noche, cuando acontece el misterio. Cuando muy despacio nos dice que es la hora, y hacia ella vamos, de la mano. Sin gritar. ¡Es muy temprano!

sábado, 26 de marzo de 2011

Las inclinaciones presentes



Trabajo varias horas al día en la teoría de las inclinaciones. Desde 1984 no deja de rondar en la cabeza, y aunque los frutos sean escasos, la fuerza es impresionante.

El tono en la poesía es el mandamiento de respeto al prójimo. Como si desearas dar un abrazo muy grande a una persona. Lo estrechas entre los tuyos y suspiras. No debes esperar un resultado. Tampoco el abrazo en sí es manifestación de ofrecimiento. Es una necesidad.

El tono en la poesía es la hoja que cae al suelo y se deshace lentamente en la boca de la hormiga. El mensaje que nunca recibes y esperas. La canción que tarareas musicalmente.

El tono en la poesía es la fusión de las tres inclinaciones, y en cuyo oficio la muerte nunca está presente.

Se ha fundido la bombilla del baño y estoy dentro. Cierro los ojos e imagino una luz propia. El tono me ayuda.

Releo una antología de la poesía chilena del 2004, prologada por Raúl Zurita, que me envió Cristián Gómez Olivares. Este tiempo que corre no es el mío. Todo aquello que me rodea no lo comparto. La cadera vuelve a jugarme una mala pasada, y esta vez en la tarde.

La poesía chilena posee un tono peculiar, arriesgado, pero completamente necesario de conocer. Todo se lleva, aunque nada vale. Y lo que se salva, determina.

Jorge, Nacho, Manu, Ale. Hoy me acuerdo de vosotros y os escribo. No dispongo de tiempo para la carta a lo Elías Moro (que espero de rodillas), pero os pongo unas letras, mientras reclamo algunas de vuestras canciones. Y bajito, muy despacio, repito las diferentes definiciones del tono en la poesía. La teoría de las inclinaciones.

viernes, 25 de marzo de 2011

Antonio Colinas y Aquilino Duque en Siltolá

Nicanor



El mar siempre es grande. Nunca se pierde el hombre en su inmensidad. Repito una a una las estrofas de esos poemas casi desdibujados del cuaderno marrón. Tengo cada día más frío, y aunque me abrigo, necesito una dosis bien fuerte de Nicanor para entrar en un calor falso.

El café es extraño hoy. Todo es mentira. El miedo y el respeto han dado paso a la ausencia de clase. Por más que intento recordar (hasta imagino sus vidas en secreto) no encuentro ningún buen poeta sin clase. Locos, bohemios, extravagantes, maricones, los hay de todo tipo. Diferentes, comunes, serios. Una pizca de la clase necesaria es evidente. Y aquí todo es importante.

Salto al vacío. Cierro los ojos. La postura del silencio no ha conseguido el objetivo. Hay que elegir. En la vida hay que elegir. Olvídate de los intereses personales, de las promesas incumplidas, de los deseos propios y ajenos. Olvídate. Salta al vacío conmigo. Te doy la mano. Pero olvídate. Confía. Nunca es tarde.

España está llena de aprendices de poetas, que naturalmente no disponen de la mínima y exigente clase personal. Y eso aburre. Algo más que la falta de lección personal. Blanco o negro. Bueno o malo. Rubio o moreno. Todo el mundo está anclado. El mar me pierde.

La moda no conviene. Y esa falsedad delimita tus actuaciones. Todo está bien. Todo es grande. No lo olvides. Todo, menos tu poesía. De tu persona ni hablamos.

jueves, 24 de marzo de 2011

Medidas




Moro



Vuelvo de Cáceres con un buen sabor de boca. Me dicen que Corina estuvo muy bien en Sevilla. Fue un martes redondo, que no cerrado.

Con Diego Vaya, acepto algunas de sus indicaciones. Otras las analizo muy detenidamente. Mucho. Existe un concepto poético métrico que recuerda a JRJ. Y él era un grande. Intento aprender de los sabios, soy todo lo que piden ellos.

Esta maldita primavera ha entrado de puntillas. Y diciendo con la mirada lo que desea comentar. Vino en un tiempo equivocado.

El color de la luz en la carretera me apasiona. Al igual que las mimosas ya amarillas. Como la cubierta de El Bardo de Cumbreño. Elías Moro es el hombre más generoso que he conocido en la vida. Al llegar a casa he recibido un paquete. Y Manuel Vázquez Montalbán me apasiona. Una educación sentimental hace que me derrita en primavera. En el resto de las estaciones ya me encuentro entregado.

Tenía mono de café. De máquina. Y he dado un fuerte abrazo a la Custom cuando he abierto la puerta. El café con la guitarra sabe mucho mejor. Y no suena a triste.

Muevo las manos y te recuerdo. Me cuelgo en tu vuelo a cada instante. No es justo que todo comience y que todo termine así, sin más.

¿Recuerdas mis abrazos? Todos eran verdaderos, y ciertos, y justos, como los versos de Luis Rosales que he leído a mi hijo. Digo con la mirada lo que con mi voz no puedo.

No aparto de mi cabeza a Luis Rosales en su casa. Me sentaba frente a él con las manos juntas. Sudaban mucho. Rocío me envía poemas de JRJ. ¡Qué grande es la poesía de Rosales! ¡Qué inmensos son los versos de JRJ!

miércoles, 23 de marzo de 2011

Cumbreño



La mejor forma de descubrir la poesía es convivir unas horas con José María Cumbreño. Lo demás no tiene sentido.

martes, 22 de marzo de 2011

Tejada



En la historia de nuestra literatura hay poetas que por “causas mayores” no han alcanzado el reconocimiento que su obra merecía. Es el caso de José Luis Tejada. Miembro de pleno derecho de la generación del cincuenta, su poesía es profunda y excelente. No obstante su familia tomó la decisión hace unos años de elevar al grado sumo el propio conocimiento.

Querer reconocer desde dentro una obra es una muestra lícita del cariño. Pero limitar el conocimiento de su obra inédita, como si de un Rubén Darío se tratase, es un error.

Con cuentagotas aparecen poemas de Tejada, se realizan congresos en torno a su poesía (me sorprende profundamente que Jaime Siles esté siempre al frente de los actos, no por desconocimiento o capacidad, sí por la diferencia abismal que existe entre ambas poéticas).

Pienso que si la obra de Tejada se hubiera quedado al amparo de las olas, tendría mayor reconocimiento. Unas palabras para su familia: “No la toques más, que así es la cosa”.

Wolf



Corina es comunicación. Paseamos por Sevilla en busca de un frío que nadie ve. No llega el sueño. El Salvador está precioso. Mañana presenta su libro aquí y yo estaré allí, en Cáceres. Tengo ganas de dar un abrazo a Cumbreño. Y escucharle leer poemas redondos. No se puede estar todavía en dos lugares a la vez. Y si recuerdas mis abrazos, suenan a triste.

Abandono Facebook por Twitter. Lo veo más poético. Y allí están ellas. Las princesas que yo quiero: Natalia, María, Ana. Además saludaré al poeta Javier Pérez Walias, al pintor Nacho Lobato, al artista Pablo Pámpano. Me quedo en Atrio. Se puede comer y se puede dormir.

Escucho los últimos temas de Elisa muy bajito. Hay algunos retoques que molestan. Tan bajito que me duermo. Cierro los ojos y observo los círculos cerrados. Hoy he recibido una llamada brutal. Alguien que lee en entrelíneas y desea justificarse. Y la vida en sí es mera justificación.

Disfruto con Aquilino Duque, y mucho más con Antonio Colinas. Es inagotable. Su poesía es infinita. Debo a Antonio Porpetta la frecuencia de trato con Luis Rosales. Y a Luis Rosales debo el descubrimiento de Nicanor Parra. Tengo bastante. Todo me sobra. Los malos versos ajenos que van a donde dicen. Solo se queda lo mágico. Todo suena a olvidar.

El vino de Arcos se sigue repitiendo. ¡Todavía! Pero, realmente, ¿fue el vino o la desdicha?

lunes, 21 de marzo de 2011

Liam



En Arcos hacía mucho frío. Acudí a la cueva de Alcaraván. Bar típico, restaurante y lugar de la tertulia de ese municipio. No encontré fotos de poetas. En su defecto un gran poster de una cantante local de copla de buenas carnes y tez rosada. Entrábamos en calor por el microclima de la propia cueva, no por el vino un poco frío.

Esta mañana paseaba con Abel Feu por el mercadillo buscando libros. Apareció uno del hijo de Luque Gago. Se lo había dedicado a un señor con mucho afecto y se vendía por dos euros en el puesto de un rumano.

La intrahistoria de la literatura guarda secretos en los mercadillos. Hay poetas que se han cambiado el nombre y de pronto, sin más, aparece un libro de su etapa primera entre tornillos y ruedecitas. Lo tomas en las manos y lees. ¿Recuerdas? ¡Qué será entonces!

Un libro magnífico para editar. La intrahistoria. La verdad de la buena. ¡Menuda sorpresa! Y menudo chasco para algunos. Se escribiría la historia de otra forma.

Salvador Bofarull quiere que le presente en Sevilla su libro Demonios. Recuerdo que en el desconcierto hay un poema que comienza “nunca bajé al infierno pero sentí su frío”. Seguro que no era como el de ese vino local que aún se repite. Ahora todo toca a olvidar, hasta esas notas de guitarra. Los versos los repito con un buen café entre las manos.

Mi mirada habla por mí. Nada tengo que decir. El cuadro de Ramón Charlo debo ponerlo en algún sitio, no me queda más espacio. Voy abriendo los círculos cerrados, intentando hacer rombos. Y a ser posible, tres.

domingo, 20 de marzo de 2011

Sam



Me aburrí en Arcos. Quitando a Julio Mariscal, Arcos es triste poéticamente. Un tono incapaz de alimentar, y mucho menos de sorprender.

Llevo todo el día quitando malas hierbas. Me duele el cuerpo. Tal vez por ello he ampliado con cuatro nombres propios mi lista negra. Ya tiene once integrantes, y deseo llegar al millar en este mes. ¡Sigue tocándotela, Sam!

En los últimos días he descubierto mucho. Han defraudado los protagonistas, aspirantes de lo literario. ¡Qué horror! Y se lo creen los capullos. Y piensan que son geniales. Este es un mundo de indisciplina, donde se bombardea al pueblo y se asesina a inocentes.

Sharleen desea que revise una de las canciones nuevas. “Road white lights”. No la entiendo, parece de Arcos. Sigo con el desconcierto, y todo me provoca desencanto. La machaco tanto hasta quedar en algo así como “Dream of Paradise”. Nada tiene que ver, pero mucho que sentir. Seguro que no la incluye en el álbum.

Preparo mi marcha definitiva. Voy a dejar de existir. Pero no temporalmente, será completa y mente. Lo único que perdí en los años de vida real fueron los círculos cerrados. Por ejemplo, A.F., E.G., P.S. y J.M., forman un círculo cerrado. Y ese círculo, como las ondas multiplicadoras, contempla a su vez otros círculos concéntricos. Y van creciendo, pero también van menguando. Y el origen pierde fuerza. Al final hay calma chicha. Esto se consigue con cien años de paraíso. La justicia.

Cristián Gómez Olivares dice que soy silencioso. No me gusta hablar por teléfono. Mis mensajes son cada vez más cortos. Y los emails los detesto. La comunicación es personal y única, y la única posible es el silencio.


(Por cierto, tú, sí tú, el cotilla, gran maese de los aprendices, pero feo como tus muertos, corre, envía el email ya, anda, coméntalo que se lo pierden, y mientras tanto ¡sigue tocándotela, Sam!).

viernes, 18 de marzo de 2011

Benicio



No puedo contradecirme y lo hago. La diferencia entre un primer espada y un muletilla no existe. Tal vez en el asiento que ocupen en la furgoneta. En el número de la colección editada. O en el rostro. El primer espada suele ser bastante más feo, muere antes (por el riesgo), y se alimenta mucho peor.

Los protagonistas tienen amigos comunes y agradecidos. La mala gente que ocupó un espacio físico a base de engañar y mentir.

Un letrero en la calle me hace pensar. Era el horario de un establecimiento. Paseo por Columela, y ya en la Viña me dicen que están acojonados con lo del tsunami. ¿Y si viene pa Cádiz pisha?

Un librero de Lisboa me pide libros y a cambio, me remite las últimas obras de poesía portuguesa. Su lectura me hace dudar de nuevo entre los primeros espadas y los muletillas. Muchos grandes de este país escriben peor que los muletillas de Portugal. Pero tienen un Ministerio de Cultura, un carné del partido que sea, y publican en los lamentables suplementos y revistas literarias. La mala vida que diría un toro.

Hace años, no tantos, metías en una bolsa poemas de diversos poetas de la experiencia y construías un libro que podía haber firmado cualquiera de ellos. Hoy lees una reseña y te entran ganas de quemar las librerías.

Pero ya comienzo a contradecirme y a decir tonterías. Y mi madre dice que tonterías las justas. ¿Y si viene un tsunami y se lleva la espada?

21 de marzo: Día Mundial de la Poesía





Ministerio de Cultura.

jueves, 17 de marzo de 2011

Un poema visual de Miguel Agudo





© Miguel Agudo.

Fredrik



Como un explorador más repaso las últimas pruebas de Una aproximación al desconcierto y descubro el sentimiento equivocado. La síntesis de la vida propia y ajena plasmada en unos versos sin conciencia temporal. Puerto Real, Londres, Moguer, Sevilla, Barcelona, Cádiz, Madrid. Ciudades exploradas que ahora suenan a olvidar. Quince años de silencio.

Mis círculos se cierran. Vuelvo a tener frío. Si el poema no castiga no sirve. Latigazo, chispa, verosimilitud. En el fondo es un ejercicio de olvido. Crear para vivir. ¿O vivir para crear? Una mirada extraña vuela sobre la última canción. Y este invierno me tiene agotado.

No sé volver al principio de las cosas. Lo pequeño es silencio. Un simple verso. Una palabra. Y también un abrazo. Nada suena ahora a triste.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Francis



Todo el origen de la crisis que vivimos es social. Los seres humanos han dejado su esencia para convertirse en especuladores del absurdo. Y han conseguido un resultado nefasto. Tenemos mucho trabajo, hay que empezar desde la base, como Sir Francis.

Vuelvo a casa. He cenado con Juan Ignacio Zoido y un grupo reducido de amigos. Zoido es el candidato popular a la alcaldía de Sevilla. Y tenía muchas ganas de escucharle, de observar sus reacciones, su defensa y su ataque.

No saco conclusiones, más aún sabiendo que estará leyendo este cuaderno en estos momentos. Prefiero decir que quiero para Sevilla un alcalde enamorado, y Zoido está enamorado de la ciudad. Y nada más. Su capacidad de convicción la pongo en entredicho, su falta de carisma también. Pero tiene quince ideas claras, las justas y necesarias.

Mi voto es un secreto a voces. El no voto es mi hecho. Pero no se lo digas a nadie.

La única preocupación que tengo en estos momentos es la juventud y su talante, su pasividad, su acostumbramiento. España es el país de Torrente, de Belén Esteban y de prensa y tele rosa. De mierda y regocijo. España huele mal. Huele a tele basura.

Mis círculos dejan de ser cerrados para hacer lo que realmente quiero, debo y poseo. Hace frío esta noche de marzo. Vuelvo con la cabeza alta y un sonido a olvidar que no respeto.

martes, 15 de marzo de 2011

Roal



La supresión de los álogos del cuaderno se debe exclusivamente a dos motivos. El primero de ellos es la poca clase que tienen algunos lectores en agradecer un texto escrito. Esto es: “¡Cabrón!” y cosas similares. Gracias, muchas gracias por esa batería de halagos inmerecidos. El segundo motivo es la falsedad del mundo virtual. Escribes, tienes un cuaderno para transmitir, comunicar. La vanidad está en ti. Pero ya es suficiente. No hace falta leer imbéciles álogos de gusto, placer, y corridas impersonales. Falso, todo es falso.

Hasta ese grupo de seguidores diarios que magnifica las renuncias irrealizables. Ese también miente. Todo el mundo va a su puta bola, y al interés.

Otro aspecto crepuscular son las amistades peligrosas, innecesarias, las tertulias o grupos de aprendices que se reúnen para alabanzas mutuas. Si el arte es soledad y es silencio, la necesidad no existe, al menos no debe existir. Los pollos de cristal, los betadines, y todos cuantos buscan el placer en el acompañamiento morirán como Roal, pero sin haber descubierto ni una sola ruta.

Si JRJ hubiera tenido un cuaderno, no tendría álogos, y desde luego publicaría lo que saliera de sus pelotas, perdón, jenitales.

lunes, 14 de marzo de 2011

El golpe a lo ZP




Stanley



La diferencia entre estilo y clase existe. Por encima de la amistad está la calidad. El agradecimiento es dignidad. Lo mediocre abunda y confunde al pueblo. El lector no entiende. No quiere entender, ni se deja aconsejar. Los suplementos literarios de este país son pésimos y los críticos indecentes e incultos. Si te dejas llevar por la amistad acabarás como Stanley, enterrado.

La poesía es exploración. Constantes misiones en busca de una única verdad: la exclusiva realidad del silencio.

Y si algún día, no llegas al sueño, o deseas olvidar el ruido que tanto molesta, no olvides: ya no seremos nunca extraños.

domingo, 13 de marzo de 2011

COAC






La Chirigota del Menéndez.


www.lachirigotadelmenendez.es (próximamente).

¿110?




Demonios





Mi buen amigo Salvador Bofarull presentó el pasado 7 de marzo, en el Ateneo de Madrid, su nuevo libro Demonios. El acto fue oficiado por Gonzalo Puente Ojea, embajador de España, y por el profesor de Filosofía Fermín Rodríguez Castro.

Bofarull es un genio, un maestro de la verdad y el rigor. Lo conocí hace años en Sevilla, y permaneció unos días en mi casa. Con su loro Pedro. Cuando marchaba a sus obligaciones diplomáticas, escondía a Pedro. Hacía un ruido insoportable.

Ahora presenta una obra sobre el diablo, y su lectura me sorprende y cautiva. Existe, es evidente. Pero lo más curioso es que a Bofarull, Satán se le apareció con tres años.

Quien desee profundizar en este escabroso tema, debe leer el libro. La verdad al fin y al cabo existe en nuestras mentes, y Salvador la tiene localizada en grado sumo.

sábado, 12 de marzo de 2011

En el momento equivocado



Ayer perdí a una seguidora. La foto del perfil dejaba ver unos ojos bellísimos. Podían ser verdaderos o tal vez adquiridos, previo pago, en una galería virtual de imágenes. Desapareció de repente. Fue un relámpago fugaz. Había permanecido algo más de una semana. Comprobó que en una de las entradas publicadas, ponía a parir a algún emisario socialista. ¿O tal vez popular?

Se marchó. No obstante, recuerdo sus ojos. Era joven. De una generación posterior a la mía. Tenía un nombre sensual. Y su posición en la tabla me permitía divisarla constantemente.

Los ojos tristes se repiten, y nunca acaban en el cielo. Hace mucho tiempo prometí portarme bien, y no decir burradas, y velar al silencio, y desde luego no comentar nada que suene a triste.

Me marcho, salgo a la calle a buscarla pero no tengo suerte. Me arrodillo, me tumbo y miro al cielo. Esto ya no se lleva.

Todo suena a olvidar. Cierro los ojos y observo los suyos mirándome. ¡Qué frío! Si vienes por Sevilla, llámame.

viernes, 11 de marzo de 2011

El humo les delata




El nuevo corralito: No se puede rescatar a España



Es lo que leen. No se puede rescatar a España. Quebrarían las finanzas europeas. Y es por ello que inventan un sistema nada novedoso: nos van a hacer un corralito. Nuestro euro valdrá menos que la perra gorda.

Medidas a tomar ante el inminente corralito:

1. No tenga nada de dinero en los bancos.
2. Si tiene algo de dinero, sáquelo inmediatamente.
3. Los recibos de suministros, no los domicilie, páguelos por ventanilla. Así ganará días de pago.
4. Envíe una carta al diario de su municipio solicitando la dimisión de ZP.
5. Acredítese en una lengua extranjera (con nivel B2), inglés, alemán y no olvide el chino.
6. Busque a un chino o china en su ciudad. Tírele los tejos. El futuro lo tiene asegurado.
7. Ayude a quien lo necesita. Conseguirá que le ayuden a usted próximamente.
8. Deje de pagar lo que tiene que pagar. En este país al que no paga, no le pasa nada de nada.

¡Carajotadas!



Paseaba esta tarde por el centro de Huelva con un amigo. Hablábamos de un poeta actual. Le decía: “Espera que pasen cincuenta años, y ya veremos lo que da de sí su obra”. Pero mi amigo, inteligente como buen comedor, añadió: “¿Cincuenta años? ¡Si ahora no es nadie, dentro de cincuenta años ni siquiera será!”.

Llamó mi atención un cartel publicitario de la candidata socialista al ayuntamiento onubense. En él se leía algo así como: “Tenemos respuestas”. Y pensé, “¿Respuestas?”. Se han cargado España. Hemos retrocedido treinta años en el progreso. Y si tienen respuestas, ¿conocen las preguntas? Vaya panda de impresentables dando respuestas, estos socialistas de la madre que los parió. Y con un país hundido, los carajotes de la derecha tocándose las pelotas. La clase política. La puñetera clase política.

Como gaditano me avergüenzo de la Bibi. Y digo gaditano, me avergüenzo de la “gaditano” Bibi. No “ana”. Es un orgullo ser hombre. Y ser mujer. Pero no es un orgullo ser un miembro. Y mucho menos una miembra. ¡Carajotadas! Han intentado entretenernos tocándonos los miembros mientras destruían la esencia de una nación fragmentada.

Recuerdo el partido del Jerez con el Cádiz en Chapín. A los gritos jerezanos de: “Cádiz es un pueblo, Jerez la capital”, se inundó el silencio en el estadio. Silencio terrible. Pero a los pocos segundos, los aficionados del Cádiz gritaron:

- “¡Los Reyes son los padres, los Reyes son los padres! ¡Jódete!”.

jueves, 10 de marzo de 2011

Vanitas vanitatis





Vanidad



Hablas con la mirada. El cuadro está torcido. La impresión de los sentidos en la pared nos pone nerviosos. Apuras el zumo de mandarina y siempre caes, vuelas lo justo. Pero por favor, debes poner derecho el cuadro antes de marcharte. Adiós siempre suena a triste.

miércoles, 9 de marzo de 2011

México D.F. (2009)



Bajas las escaleras corriendo,
saltas los peldaños de dos en tres,
y hasta te permites el lujo
de reclamar un abrazo infinitivo.
El ruido de la puerta me delata
y ya te tengo enfrente.
Disimulo un mal cuerpo,
tomo un café en la cocina
y voy recitando frases tristes.
Aún estás delante de mis ojos.
Sigues haciendo lo que quieres,
guardas el miedo. Las mentiras
son promesas perdidas de un final
mutuo, evidente, necesario.
Subo las escaleras mientras te desnudo.

Vanitas



Siempre pensó que la fotografía era el arte de figurar al descubierto. Por eso su casa estaba repleta de retratos anónimos.

Un día, mientras recordaba unos versos antiguos, cubrió su rostro con un velo.

martes, 8 de marzo de 2011

Vanitate



Preparó café. Dos paquetes de cigarros y un buen cenicero. Folios y cuadernos sobre la mesa. Se disponía a escribir el poema de su vida.

En el suelo, los ciento veinte tomos de la Larousse.

lunes, 7 de marzo de 2011

Vanitat



Pensaba como Cernuda, comía como Lorca, dormía como Borges.

Y escribía como J.R.J.

Vaidade



Comentaba a todo el género poético la carta recibida, de un autor de prestigio, sobre su última publicación.

Sentía la grandeza por su piel, y la vanagloria en su intelecto.

Cuando llegaba a casa leía el escrito -ya plastificado-, y hasta se le saltaban lágrimas.

"Acuso recibo de su obra. Gracias."

domingo, 6 de marzo de 2011

Vanity



Prometí portarme bien. Desde entonces no muerdo mis uñas, ni arranco pelos de la barba. He dejado de ser extraño. Voy a olvidarme del mundo. Y a la segunda irá la fructuosa.

Vanité



Dejó de hacer sus necesidades para no expulsar grandezas de su propio cuerpo. Había agotado la edición de sus obras completas, y figuraba como el autor plus leído de poesía. Cuando falleció el perro (mejor amigo de los excrementos), descubrió que la tirada fue de un único ejemplar.

sábado, 5 de marzo de 2011

Vanità



Era tan grande la falsedad de los conductos capilares ajenos, que un día decidió hacerse permanente. Agachó la cabeza y nunca más fue visto.

viernes, 4 de marzo de 2011

Angel of passion



Vivía para morir
pero la muerte le asustaba,
y entre tanta palabra,
un día,
descubrió el argumento:
la justa soledad de la mirada.
Nunca será un extraño en nuestras vidas.
Este ruido se marcha en los ojos,
el primer sueño, ese abrazo
hacia la carencia involuntaria.
Fue extraño, pero llegó
en el momento equivocado:
tristeza de bares y promesas incumplidas.
Le llamaban Pasión y era mujer.

jueves, 3 de marzo de 2011

Final de 2011 COAC Carnaval de Cádiz



Sobre gustos no hay nada escrito, pero que este año las cosas no han olido nada bien desde un principio, es evidente.

Mucha suerte a los finalistas.


COROS

Allegro Molto Vivace
El Triángulo
La madrugá

CUARTETOS

Los que cogieron al mono Amedio y lo quitaron de en medio
Si Emilio hablara...
Aquí el que no corre vuela

CHIRIGOTAS

Ricas y maduras
Los niños cantores de Viena o de Manolete
Los Juaquín Pamplina, cantautor de la plaza Mina

COMPARSAS

Los currelantes
Las locuras de Martín Burton
Juana la loca

miércoles, 2 de marzo de 2011

En cuerpo o alma






La primera vez que visité Moguer, creo recordar, fue allá por el año 1979. Salí del municipio con una botella de dos litros de vino de naranja y una enorme caja con unos diminutos pasteles exquisitos. Regalos de Ventura Vivas. Circunstancias excepcionales me dejaron en ese pueblo al año siguiente. Vivía en una casa frente al Puerto Rico (hoy desaparecido), al lado de la plaza del Marqués.

He escrito mucho sobre mi estancia en Moguer. Ayer hablaba con Diego y recordábamos momentos de los que ahora me asusto, pero nunca me arrepiento. De vez en cuando acudo a por pasteles, para dar un paseo, o saludar a amigos.

Aquella crema pastelera (fina como ella sola) que rellenaba las maravillas, la comía (gracias a Maricarmen) con cuchara de palo. ¡Qué ordinariez más sana!

Y ahora, han pasado los años. Antes se vivía mucho mejor. Hemos pasado de la alegría a apagar el alumbrado de las autopistas. ¿Qué nos espera? ¿Qué espera a nuestros hijos?

De momento mañana volvemos a Moguer. Y lo hacemos con el libro de los niños. Será en la Casa-Museo de JRJ, junto a la que fue mi casa.

Gracias por las facilidades Antonio, y muchas gracias Rocío.

Os espero a todos (en cuerpo o alma), en Moguer. Mañana jueves. A las siete de la tarde.



The Feelings (18) (Segunda Inclinación)



Cada día que pasa tengo la fortuna de comprobar el silencio de la poesía. En la creación y en la lectura o recreación. Las presentaciones son odiosas. Los comentarios son insostenibles. Y hablar de uno mismo y de su obra, es patético. Paseo por Sevilla por la mañana y por Cádiz en la tarde. Largos recorridos. En soledad, sin compañía. Sonidos de ambientes que refrescan y enriquecen.

Respondo a todos y a cada uno de los libros que recibo para su publicación. No he dado un sí en seis meses. O me estoy volviendo purista o lo que escriben los aprendices es una auténtica mierda. ¿Cómo se puede comenzar un libro con axilas sudadas? ¿Y con estertores rastreros? Y no quiero mencionar el plátano de tu cadera.

Incluso un candidato indica que de su libro, una administración autonómica, comprará mil ejemplares. ¡Ni diez mil coño! Aunque tenga que hacer los cuadros con una regla.

Y la moda ahora es recibir poemas e ilustraciones o fotografías. Algún día, con tiempo libre, haré un collage, para la gratificación de los sentidos (comunes, se entiende).

Leo los libros de la final de un premio, y acabo por tirarlos todos. ¡Basura! ¡Gran basura! Le voy a decir al organizador que se cargue el premio. ¡No merece la pena! Todo debe ser silencio, gran silencio, enorme silencio, total silencio. (Un secreto: hay algunos que no pueden aguantarse, y el yo-mi-me-conmigo lo tienen hasta en el corvejón).

Algún día, cuando estés en el lecho de muerte, y el sacerdote te administre el sacramento de la extremaunción o esté dándote una hostia, no hace falta que recites de memoria las reseñas de tus libros, ni tus premios, ni lo cojonudo que eras mientras tenías pelos, en los huevos de aprendiz de poeta. ¡Ah! Pido disculpas, que los aprendices no tienen vello, poseen el patrimonio de poesía-depilación.

martes, 1 de marzo de 2011

"Los Príncipes" de Juan Carlos Aragón, merecen más



Tuvimos que esperar hasta el final, de madrugada, pero no importó. Un teatro abarrotado y feliz. Pasodobles de antología. Y este Jurado (que sigue sin enterarse) valora más los pasodobles de Bienvenido ("Los currelantes"). ¡Lamentable! ¡Nos estamos acostumbrando a la ignorancia de un Jurado de la Logse!

Aquí, la actuación completa de "Los Príncipes" de Juan Carlos Aragón. Esto huele a tufo completo. Sin Sheriff, sin Vera Luque, chirigotas de Cádiz, de toda la vida, de las buenas. Y nos parece que a este pedazo de comparsa la van a putear. ¡Esperemos que no sea así!